QUÉ ORGULLOSOS NOS SENTIMOS DE NUESTRA EXTREMA GENEROSIDAD

Como Ciudadano de Estados Unidos, me siento súper orgulloso de lo generoso y caritativo que somos. Sacamos a un Presidente que mataba terroristas y pusimos a uno que sintió pesar de que los terroristas sólo tuvieran motos y camionetas para moverse y les suplimos helicópteros, vehículos blindados, visores nocturnos, miles de armas automáticas de alto poder, millones de municiones y una fuerza aérea para atacar desde el aire.

El anterior Presidente los amenazaba y cumplía sus amenazas. ¡Que cosa más fea!. En cambio este les suplica más tiempo para sacar a los nuestros y les ruega que no trate mal a nuestros ciudadanos varados allí.

Como los Talibanes son profundamente agradecidos, nos acaban de explotar bombas y entrar a tiros para celebrar nuestro regalo.

Rubén Arroyo…Pero ya no tenemos un Presi grosero.