“SEÑOR...¿PODRÍA USTED RESPIRAR POLÍTICAMENTE CORRECTO?...ME OFENDE COMO USTED RESPIRA.

Ruben Arroyo...

“Políticamente Correcto”. Cuando escuché esta frase por primera vez, tuve la impresión de que me invitaba a decir las cosas o las opiniones de tal manera que a nadie le resultara ofensivo. Que no dejara la más remota sospecha de que alguien se sintiera aludido en forma negativa.

Así que ensayé tonos de voz, gestos faciales, palabras formales con tonalidad poética, rítmica y a la vez simples e inclusivas. Por más que lo ensayé, no logré satisfacer las exigencias de esa frase.

Descubrí que el que me leía y escuchaba ya me conocía sin conocerme y también sabía por qué lo decía sin jamás haber hablado conmigo.

Concluí que la frase “políticamente correcto” es una oración intrigante y divertida. Puede tomarte todo un día elegir cómo dirás una sola frase con el conocimiento anticipado que de todos modos esa sola frase tendrás que explicarla después con largos ensayos que llenarían una biblioteca entera tan pronto otra persona la lea o la escuche.

Y después de escribir la biblioteca motivada por la reacción de la frase, se repetirá la historia esta vez más complicada porque tendrás que escribir bibliotecas acerca de la biblioteca que ya escribiste.

En resumen, descubrí que vivir “políticamente correcto” es algo así como...

Estar bien y estar mal al mismo tiempo. Tener la razón y estar equivocado por igual. Cocinar buenas intenciones con malos ingredientes y que a todos les guste y todos se envenenen a la vez. Que no insultes pero todos sean insultados.

Que una sola frase que no tiene nada que ver con mi madre hace que me la mencionen sin saber su nombre. Que defiendo y ataco al mismo tiempo. Que entiendo y no entiendo lo que entendí porque realmente no entiendo.

Que no me haga como que sé, porque no sé lo que sé porque lo que sé, lo sé porque aún nadie me ha recordado que no sé, pero si espero a que alguien me lea me hará saber que no sé lo que creí saber y jurará que sabe el color de mi camisa También. ¿No le parece divertido?. Ya sé que no. Se ofendió porque entendió y está seguro que yo pienso que no.

Pero no lo diga porque saldrá otro que sabrá cómo se llama la suya sin que nadie se lo haya dicho también. ¡Uff!....Eso tampoco debí decirlo porque ya alguien se ofendió. Luego se ofenderá otro porque se ofendió el primero.

El que se inventó la frase “políticamente correcto”, ni era político ni estaba en lo correcto. Lo descubrió tan pronto alguien leyó la frase. Inclusive, ya alguien tenía una idea de por qué se le ocurrió la frase antes que la dijera.

A propósito....¿podría arrancarse ese pelito que está al lado del otro y detrás del que estoy mirando?. Ese pelito me ofende.

Bueno...déjame cantarle un himno al Señor frente al espejo, a ver si logro cantarlo sin que a Él...le parezca estúpido. Y sin que yo lo parezca tampoco.

Rubén Arroyo...🎶 Cuán graaaaaandeeee es ĖLLLLL🎶