TE LLAMÓ A TUMBAR GIGANTES...NO A DISTRAERTE CON ENANOS.

“...y la palabra era verdadera, Y EL CONFLICTO GRANDE; pero él comprendió la palabra, y tuvo inteligencia en la visión.”

‭‭Daniel‬ ‭10:1‬ ‭

Aunque ocurre en todas las naciones, haré referencia a la nación en que vivo, de la cual soy ciudadano y en lo espiritual es el lugar de mi asignación primaria.

Existe una guerra brutal sobre el destino y rumbo de los Estados Unidos. Después de 8 años de gobierno extremadamente liberal, comenzó un alineamiento acelerado empujando las leyes hacia un estado de cosas más cercanas al corazón y la mente del Señor respecto a la nación y al pueblo de Israel expresada en la biblia.

Esas decisiones revelaron una gran división en la nación que yacía escondida y disimulada en una fachada de opulencia, estructuras mediáticas, influencia política y poderosas fuerzas económicas.

En el 2019, Dios trazó una línea en la arena, exponiendo corazones, agendas escondidas, intenciones ocultas y estados reales del corazón. Esto ocurrió y sigue ocurriendo tanto en el mundo secular como en el religioso. El grano y la paja están siendo separados.

Todo creyente tiene la militante responsabilidad de entre cientos de estímulos externos y ruidos de toda clase y dirección, identificar las prioridades de la agenda del Señor y las cosas en el mundo natural que poseen trascendencia y relevancia.

No es hora de ser distraído por lo desechable, provisional o irrelevante. Sepa usar su tiempo, energía y enfoque hacia lo significativo e imperante. No olvide las maquinaciones de satanás.

Use sus redes sociales para edificar, consolar, inspirar y guiar a esperanza, optimismo y fe. De la abundancia del corazón no sólo habla la boca sino que también se hunde la tecla. Lo que usted escriba hablará de usted, pero lo que decida leer de otros también.

Daniel tuvo una absoluta conciencia de lo que era su prioridad porque la gente que es grande en el Señor se ocupa y emplea en cosas grandes.

Aunque la PALABRA ERA VERDADERA...EL CONFLICTO SOBRE ELLA ERA GRANDE. Pero “comprendió la palabra y tuvo inteligencia en la visión”.

Todo creyente contiene grandeza. Pero al no tener revelación de eso, muchos se ocupan y reaccionan a cosas pequeñas. Como creyente, usted no tiene licencia para ocuparse en cosas pequeñas porque ese no es el tamaño de su asignación.

Lo que veía y escuchaba de su Padre capturó el enfoque, tiempo y energía de Jesús. El tenía conciencia absoluta del tamaño de su misión.

PORQUE AQUELLO QUE OCUPE TU ATENCIÓN...SÓLO TERMINA REVELANDO...EL TAMAÑO DE TU ASIGNACIÓN.

Rubén Arroyo...Discúlpame enano, mi asignación es el gigante.