Y ESTA ES...MI SIMPLE TEOLOGÍA DE BARRIO
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“Porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni vuestros caminos mis caminos, dijo Jehová. Como son más altos los cielos que la tierra, así son mis caminos más altos que vuestros caminos, y mis pensamientos más que vuestros pensamientos.”
Isaías 55:8-9
El no es un ser humano. No piensa como nosotros pensamos al mismo tiempo que sabe todo acerca de todo, sin que lo que sabe se parezca a lo que nosotros sabemos. Y eso...podría ser intimidante.
Lo fuera menos si supiera que su forma de ver justicia se pareciera a como yo la veo. ¿Por qué a gente buena le pasan cosas malas y a gente mala le pasan cosas buenas?, es un tóxico para la fe de muchos y un misterio para los que intentan defender la suya.
“Sus Caminos”, es una frase extraña a la cuál, la más experta mente teológica no podría jamás acercarse ni al filo inicial de su descomunal contenido.
¿Por qué Dios piensa como piensa, hace o permite la cosas como ocurren y no parece atraído a explicar lo que hace y por qué?, define esa extraña tensión en la que transita la jornada de todo el que escogió el camino de una Fe cruda e inquebrantable.
Se manifiesta y se esconde. Se revela y permanece siendo un misterio. Espera que le crea sin titubear en medio de una realidad que insiste en contradecir lo que dice, mientras en forma disimulada va dejando sutiles huellas de su mano en medio de nuestros pasos.
Le debo escuchar cuando su voz es un diminuto susurro insinuado o cuando es un potente trueno mezclado entre cosas ordinarias y comunes. Creer es fácil y a la vez no lo es. ¿Y sabe por qué?...
La Fe la recibo desde un mundo superior de verdades absolutas, destinadas a ser liberadas en medio de un mundo inferior compuesto de verdades relativas, desechables y provisionales porque están sujetas a la caprichosa interpretación de seres que eligieron hacer de Dios una opción entre muchas.
Mi sistema de creencias se sostiene de una sola verdad inalterable:
DIOS ES BUENO TODO EL TIEMPO AL MISMO TIEMPO Y EN TODO LUGAR. NO NECESITO ENTENDERLO NI EXPLICARLO...SÓLO LO SÉ.
No. No conozco todos sus caminos. Pero me basta los que ya conozco para amarlo y adorarlo.
Rubén Arroyo...Entre revelación y misterios.
